El rol de víctima.

A lo largo de los años, y no es que tenga muchos, pero con casi toda seguridad ya pasé el ecuador de mi vida, y «gracias a» o por «desgracia» debido a mi trabajo, he conocido y supongo que seguiré conociendo a un montón de gente. Gente con la que acabas relacionándote al cabo del tiempo y acabas conociendo muchos detalles de su vida.

Hay muchas personas que realmente en el pasado, por distintos motivos tanto sociales, personales, económicos, etc. han sido víctimas de las circunstancias, unas veces de forma involuntaria totalmente, viéndose involucradas en situaciones no deseadas, y otras buscándolas «involuntariamente», ya que si te asomas con frecuencia al borde de un precipicio, aunque tú no te quieras caer, es bastante probable que….»tanto va el cántaro a la fuente…». Obvio el que se lo buscó.

Lo que me acaba «repateando» de ésta gente, es que asumen el «rol de víctimas». Cualquier circunstancia en la que se vean envueltas que no sea favorable a éstas personas, ya es una catástrofe. Ya sólo ellas son las perjudicas, siempre a ellas les tiene que pasar todas las desgracias, en definitiva, «es el mundo en contra de ellas» (por cierto, al referirme a «ellas» estoy refiriéndome a esas personas, no al sexo femenino en concreto. Que aquí hay que hilar fino, que enseguida te llaman la atención).

Pues NO señores NO, no eres una víctima. Te has encontrado con un problema o con una situación, posiblemente provocada por tí en muchos casos, que no se ha resuelto de la forma que tú querías, pero al igual le pasa a otras personas y non van de víctimas por la vida. Y los demás no tienen culpa de tus buenas o malas decisiones. Posiblemente incluso esa mala decisión tuya, inmadurez en muchos casos, haya provocado una «víctima» en la situación que has creado, y no tú.

Cuando los acabas conociendo al cabo del tiempo, ves que tienen una vida, de cara al exterior por lo menos, llamémosle «estándar», ¡como la mayoría de los mortales vamos!, comemos, dormimos, trabajamos, intentamos educar y sacar adelante a nuestros hijos, todos tenemos nuestros problemas de uno u otro tipo, que nadie está sin ellos, y poco más. Y así es la vida de la mayoría de la gente, algo aburrida y monótona, sacando gracias a dios, algún buen momento.

En definitiva, y para no extenderme más, al final, si son víctimas, pero víctimas de su pasado, víctimas de lo que se volvieron, egoístas y egocéntricas. Poniéndole «peros» a todo. Todo es un problema, todo lo que les rodea es creado para amargarle la existencia. «El mundo está en contra de ellos».